Práctica 13: O Pelouro
La escuela O Pelouro, de integración e innovación psicopedagógica, tiene un funcionamiento bastante diferente al de la mayoría de los colegios en este país.
En una búsqueda por internet sobre su funcionamiento más concreto, más allá del documental que se nos puso en clase, en general todo lo que se encuentra sobre O Pelouro son cosas muy positivas. Una escuela abierta, de integración, con una metodología completamente diferente a lo que estamos acostumbrados a ver en la escuela convencional, con un tipo de aprendizaje por descubrimiento donde los niños van conformando su propio plan de estudios y su velocidad de aprendizaje. El video que vimos en clase me rechinó un poco. Me daba la sensación de que los niños estaban haciendo proselitismo sobre el propio centro, con discursos aprendidos para la ocasión, poco espontáneos, un poco tipo secta. Yo he asistido a dos colegios de integración, y creo que es tremendamente complicado hacer un proceso de integración bien. No tengo demasiada información del centro que me permita decir lo contrario, pero a priori no sé cómo se puede llevar un centro de integración solo viendo las imágenes del documental. Los contenidos tienen que estar adaptados, la supervisión tiene que ser máxima, y, sinceramente, esa no es la impresión que me dio. Por otro lado la Consejería de educación de la Xunta les retiró la acreditación de secundaria por deficiencias en las instalaciones, no tengo manera de saber qué había de verdad en eso o no, el caso es que no están acreditados en la actualidad, según parece, así que la primaria se escapa un poco a nuestro futuro profesional.
Por otro lado, es cierto que todo son comentarios positivos con respecto al centro, así que, al menos sus estudiantes y sus familias están contentos con los resultados, nada que decir al respecto.
Puede que sea muy conservadora en lo que respecta a algunas técnicas educativas. Supongo que debería de tener la mente más abierta. En cualquier caso, no me parece nada mal que haya distintos estilos educativos y que los padres y madres tengan las opciones de elegir, siempre y cuando cumplan unos mínimos reglamentados en la legislación vigente.
En una búsqueda por internet sobre su funcionamiento más concreto, más allá del documental que se nos puso en clase, en general todo lo que se encuentra sobre O Pelouro son cosas muy positivas. Una escuela abierta, de integración, con una metodología completamente diferente a lo que estamos acostumbrados a ver en la escuela convencional, con un tipo de aprendizaje por descubrimiento donde los niños van conformando su propio plan de estudios y su velocidad de aprendizaje. El video que vimos en clase me rechinó un poco. Me daba la sensación de que los niños estaban haciendo proselitismo sobre el propio centro, con discursos aprendidos para la ocasión, poco espontáneos, un poco tipo secta. Yo he asistido a dos colegios de integración, y creo que es tremendamente complicado hacer un proceso de integración bien. No tengo demasiada información del centro que me permita decir lo contrario, pero a priori no sé cómo se puede llevar un centro de integración solo viendo las imágenes del documental. Los contenidos tienen que estar adaptados, la supervisión tiene que ser máxima, y, sinceramente, esa no es la impresión que me dio. Por otro lado la Consejería de educación de la Xunta les retiró la acreditación de secundaria por deficiencias en las instalaciones, no tengo manera de saber qué había de verdad en eso o no, el caso es que no están acreditados en la actualidad, según parece, así que la primaria se escapa un poco a nuestro futuro profesional.
Por otro lado, es cierto que todo son comentarios positivos con respecto al centro, así que, al menos sus estudiantes y sus familias están contentos con los resultados, nada que decir al respecto.
Puede que sea muy conservadora en lo que respecta a algunas técnicas educativas. Supongo que debería de tener la mente más abierta. En cualquier caso, no me parece nada mal que haya distintos estilos educativos y que los padres y madres tengan las opciones de elegir, siempre y cuando cumplan unos mínimos reglamentados en la legislación vigente.
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